
El primer día se levantó llamándome, pasó por encima de su padre y me fue buscando por toda la casa llorando, hasta que me vio. Me hizo meterme en la cama con ella y cuando se tranquilizó (fue como diciendo, oye que quiero despertarme y que estés tú), nos levantamos a desayunar.
Ayer se levantó y en los brazos de papá me vino a buscar a la habitación, otra vez me hizo meterme en la cama y lo mismo.
Y esta mañana, se ha levantado (sin llorar) ha cojido un juguete, le ha dicho a su padre "mamá", le ha dado la mano y me ha venido a buscar a la habitación. Me ha dado un beso, otro a su padre y a desayunar.








Tengo dos campeones en mi casa. Mi pobre marido está saliendo con la espalda destrozada de dormir con la nena en la cama pequeña,

Y está durmiendo tooooooooooooooda la noche de tirón. ayer 10 horas enteras

Ufffff qué orgullosa estoy de éllos.
Y ahora en la cena, me ha escuchado decir "uffffffffff como se mueve Casandra", y enseguida ha venido me ha subido la camiseta y se ha puesto a escuchar a su tata

Mi marido se ha emocionado un montón, y yo pues qué os voy a contar

Mañana se me termina lo bueno, mi marido tiene que trabajar de noche. Pero por lo menos ya hemos comprobado que puede dormir con ella. Y las ganas que tenía él.
Hoy ha visto a su hermana y lo primero que le ha dicho ha sido " estoy durmiendo con mi niña" y su hermana


Pero mi marido estaba tan contento y orgulloso que ni le ha prestado atención, ya me ha dicho. " A mi qué, no me va a quitar nadie lo orgulloso que estoy y lo feliz de dormir con élla".
Ala, chincha y rabia


Como dice mi marido, "ya tendremos muchos años de dormir solos en nuestra cama" "ahora tenemos que aprovechar de estar con nuestras niñas, que crecen muy deprisa"
Así que por favor, los que lo veis muy muy negro, los que pensáis que nunca os va a llegar, tener fé. Que sí que llega.
Los que no me conocéis saber que hasta hace poco he estado con noches de no dormir y para mí dormir era despertarme 5 veces por la noche.
Todo llega, y lo que hay que hacer es respetar a nuestros hijos y darles todo el amor que nos piden y necesitan.
Es cierto que siempre hay luz al final del tunel.