Llevo algún tiempo leyendo el foro a ratos, si no he escrito antes es porque soy de esas afortunadas que no ha tenido grandes problemas de sueño pero me he decidido a escribiros para contaros mi experiencia y animaros un poco; sin duda, este foro está lleno de mamás y papás valientes, cariñosos y confiados (aunque a veces se flaquee, es humano!).
Tengo dos niños; Aitor cumplió tres años en julio y ha sido un niño "fácil" (entended el contexto, no hay niños difíciles




Carla nació en febrero y desde el principio colechamos. Los comienzos no fueron fáciles porque tuve la mala suerte de pasar un virus en el embarazo y me dieron las famosas pastillas para cortarme la leche. Cuando salí del hospital me puse en contacto con la liga de la leche y entre las monitoras y mi pediatra descubrieron que no había ningún impedimento para darle el pecho así que con tesón y muuuchas lágrimas conseguí relactarla a las 3 semanas de vida. Una vez estuvo con lactancia materna exclusiva dormíamos las dos como lirones

Después llegaron las inseguridades tontas y las preocupaciones por el "qué dirán". Cuando Carla cumplió los 6 meses decidimos pasarla a su habitación (teníamos la mini cuna en nuestro cuarto pero la necesitaba su prima) y entonces me puse a buscar información como una loca porque le costaba HORAS quedarse dormida. Yo me desesperaba porque no entontraba momento para cenar o para leer un cuento a mi niño así que me compré el "felices sueños" y me propuse seriamente tranquilizarme.
Otra de las "buenas" decisiones - y gracias en buena parte a la autora del libro, que da mucha confianza a las mamás - fue olvidarme de lo que los demás pensában y hacer mi propio plan de sueño.
Desde hace 3 meses Carla se duerme en unos 15 minutos al pecho, la meto en la cuna y aguanta alrededor de 4 horas. Después vuelvo a darla de mamar y me la llevo a la cama, y lo siguiente que se es que suena el despertador

Hay días malos, como en todas las casas (por cierto ¿conocéis algún adulto que duerma todas las noches de su vida de un tirón? yo no...) pero en general todos en casa estamos descansados y felices. No suelo contar a la gente que meto a la niña en la cama, estoy un poco harta de opiniones no deseadas, pero los que realmente me importan lo saben y les parece fenomenal.
Seguro que nos espera alguna época un poco peor (mi gorda es una desdentadilla aún
